lunes, 24 de noviembre de 2014

1.7. Portafolios: concepto, utilidad, ventajas e inconvenientes
Como profesora de lengua extranjera, voy a realizar mi reflexión en relación al Portfolio Europeo de Lenguas, puesto que es el que normalmente utilizo en el aula.
Comenzaré por señalar las ventajas, entre las que destaco la expuesta por el Consejo de Europa en 1998 y que reza: 
“… portfolio que registre las aptitudes y otras experiencias lingüísticas y culturales de una forma transparente com parte del esfuerzo de diversificar el aprendizaje de idiomas a todos los niveles y a lo largo de toda la vida.“
Dicha herramienta fomenta:
  • La identidad cultural europea
  • El entendimiento y respeto mutuo
  • Plurilingüismo y multiculturalismo
  • Sentar unas bases para la enseñanza/aprendizaje de lenguas extranjeras en Europa
El Portfolio de lenguas es una herramienta de información lingüística y cultural que sirve como guía de aprendizaje de lenguas e instrumento de reflexión tanto a alumnos como a profesores. 
Al tener dos funciones, la informativa y la pedagógica nos informa con testimonio exhaustivo y transparente del dominio del titular en una o varias lenguas así como de las experiencias realizadas en dichas lenguas.
Además, en su función pedagógica motiva a los miembros de la comunidad educativa ya que siempre es positivo e incita a tener contactos, visitas, participación en proyectos y utilización de medios. 
La reflexión es parte primordial en el Portfolio de Lenguas, éste nos ayuda a reflexionar sobre objetivos y formas de aprendizaje así como a planificar el aprendizaje y, como muy importante, aprender a aprender.

En cuanto a los inconvenientes, personalmente veo una en el Portfolio de Lenguas: es denso, muy denso, demasiado largo para que un alumno o profesor lo realice en poco tiempo. Así, requiere un esfuerzo y constancia que no todas las personas son capaces de llevar a cabo. Es importante enseñar al alumno la importancia de llevar un ritmo adecuado, sin olvidarse de la herramienta pero sin obsesionarse con ella. Es preferible poco y bien que mucho y mal.  

Marta García Alamán
1.3 EVIDENCIAS


Multitud de autores han expresado las ventajas, desventajas y objetivos de los portafolios. La mayoría de ellos llega a un consenso cuando se trata de un portafolio dirigido al mundo educativo. Además, estos autores parecen haber hecho un pacto sobre las fases en las que se debe basar el documento. Vamos a centrarnos en las fases expuestas por Barberá en 2005:
  
Fase 1. Recogida de evidencias

Estas evidencias pueden ser: 
  1. informaciones de diferentes tipos de contenido, bien sea conceptual, procedimental o normativo. 

b) tareas realizadas en clase o fuera de ella, como por ejemplo exámenes, ejercicios,     visitando de películas, comics, etc.

c) documentos en diferente soporte físico, bien sea papel, documento de audio,  utilización de las nuevas tecnologías, etc.

Estas evidencias siempre vienen definidas en los objetivos y competencias 
expuestos en el portafolio.

Fase 2. Selección de evidencias

En esta fase se han de elegir los mejores trabajos realizados o las partes de aquellas actividades que muestren un buen desarrollo en el proceso de aprendizaje para que o el profesor o los compañeros las analicen con posterioridad.

Fase 3. Reflexión sobre las evidencias

Esta fase es más que fundamenta  ya que si no se incluye ningún tipo de reflexión herramienta no muestra  no puntos débiles y fuertes que ayudaran en un posterior proceso de mejora.


Fase 4. Publicación del portafolio.

Esta última fase  trata de organizar las evidencias con una estructura ordenada y comprensible para favorecer el pensamiento creativo. Así, se verá con claridad que el aprendizaje está en constante y continua evolucion. 


Siguiendo este esquema, mis alumnos, en la fase 1, eligen una evidencia de clase y otra de fuera del aula. Es importante que recojan la de fuera de clase para ser conscientes de que el aprendizaje se realiza en todos y cada momento, no solamente en el aula. Una vez elegidas las evidencias, realizamos un proceso de co-evaluación en el que todo el alumnado opina, se posiciona, ofrece pros y contras, contando con la autorización de la profesora. En este caso, mezclamos las fases 2 y 3, puesto que reflexionamos y criticamos positivamente, siempre con un deseo de mejora en el horizonte. Finalmente, los alumnos rellenan la parte del portfolio correspondiente a la actividad realizada.

Marta García Alamán
1.6 ¿Qué partes componen el portafolio del alumno?

a) Análisis de los aspectos débiles y mejoras reflejadas en los textos escritos. 

Uno de los aspectos que debilitan el uso de un portfolio radica en la adecuada selección de los contenidos a insertar. si nos centramos en los portfolios de idiomas, El usuario normalmente se ve desbordado con información, actividades, ejercicios y múltiples tareas que realiza dentro y fuera del aula. Así, ¿qué añadir al dossier? ¿cómo enfocarlo? En este caso, el e-pel del apee muestra una muy buena forma de selección ya que tiene la sección “planes futuros” en la que claramente se encamina a acciones posteriores. Igualmente, el usuario puede anotar sus objetivos a corto, medio o largo plazo, lo que ayuda a la reflexion. No conozco muchos más portfolios. Una adecuada selección de contenidos al principio de su uso ayuda a una correcta reflexión y, posteriormente, evaluación del portfolio.

b) Exposición de los retos y acciones futuras.

Personalmente no comprendo muy bien esta cuestión. ¿retos de quien? ¿del alumno o usuario de un portfolio? ¿del portfolio? ¿del profesor o tutor? ¿de los padres? ¿de los compañeros? Son cuestiones que se abordan desde una perspectiva bien diferente ya que cada uno tiene su peculiaridad e idiosincrasia que le permitirá realizar acciones futuras convenientes. Cierto es que la mayoría están intrínsecamente entrelazadas pero deben ser analizadas individualmente para poder llegar a la realización de un documento completo que permita asegurar la adecuada optimización de recursos para una lógica consecución de objetivos propuestos.

En mi caso, mis alumnos abordan el e-pel con tranquilidad, sin agobios, poco a poco, siendo conscientes de que una buena reflexión no se culmina en unas horas, no en un día, sino que lleva tiempo, que es necesario comprender, asimilar y poner en práctica una herramienta a la que no están acostumbrados ya que nunca previamente han tenido la oportunidad de hacer algo semejante.

Pienso que los portfolios se deben comenzar a enseñar utilizar en la niñea, con paciencia, sin prisa pero sin pausa para que los niños, ya adolescentes y posteriormente adultos sean capaces de digerir, nutrirse y aprovecharse de esta magnífica herramienta.

c) Proyección del desarrollo personal y académico.

Poco a poco los portfolios se han ido abriendo camino entre los profesores, entre el mundo de los decentes en general. Hace 10 años resultaba impensable poder hablar sobre una herramienta de reflexión, sobre una herramienta con fines pedagógicos e informativos aunque, en la mayoría de los casos, sin valor alguno en la nota final. 

Hemos ido avanzando, se han confeccionado multitud de portfolios y los docentes nos hemos ido acostumbrando a oír e incluso comprender el significado que tiene esta bonita palabra: Porftolio.

Muchas son las definiciones sobre qué es un portfolio que los educadores han ido ofreciendo a lo largo de los años. a mi me gusta la siguiente:

Un portafolio e algo más que una mera caja llena de cosas. Se trata de una colección sistemática y organizada de evidencias  utilizadas por el docente y los alumnos para supervisar la evolución del conocimiento, las habilidades y las actitudes de estos últimos en  una materia determinada. (Vayrus, 1990, P.48) 


Me gusta porque,a pesar de que los portafolios se pueden utilizar con muchas y variadas finalidades, creo qu runa de las mayores posibilidades que tiene esta herramienta es la de cambiar la concepción que se tiene del mundo de la enseñanza, la de cambiar la actitud en el aula y fuera de ella, El portafolio sirve para que el alumno imagine, cree y desafíe la enseñanza tradicional adaptándola a sus necesidades personales puesto que cada persona es un mundo en si, mundo que evoluciona y aprende a base de experiencias propias. 

En resumen, el portafolio, en mi opinión, debería servir para estimular a los alumnos hacia retos alcanzables, transformando una clase tradicional en la que prima el colectivismo hacia un tipo de clase en el que se valore el desarrollo individual de cada alumno, lo que fortalecerá la comunicación entre aluno y docente creando en un futuro una sociedad más abierta y dinámica.



Marta García Alamán